¿Qué es una secadora con bomba de calor?

No todos los días hacer la colada es una tarea simple… Basta con vivir en una zona de clima húmedo o donde suela llover bastante que la ropa nos quedará siempre húmeda. Y meter el tendedero de casa no siempre es la mejor opción. Pues tarda mucho más tiempo en secar la ropa e incluso podría ocasionar humedades dentro del hogar.

¿Y si además necesitas urgentemente tu ropa? Quién no ha decidido darle un buen rato con el secador de pelo para tenerla lista antes. 

Si esto es tu pan de cada día con la colada… te recomendamos una secadora con bomba de calor. Este tipo de secadora puede ser una perfecta aliada para tener la ropa limpia y seca de la forma más rápida y fácil. ¡A ellas les da igual que llueva o que haga mal tiempo!

Tienes que saber que existen varios tipos de secadoras: las de condensación y las de evacuación. Hoy nos centraremos en las secadoras de condensación con bomba de calor y en sus beneficios.

Cómo funcionan las secadoras de bomba de calor

Su funcionamiento es muy sencillo:

Las secadoras con bomba de calor aprovechan el calor del ambiente exterior para secar. El aire de ésta se calienta con una bomba de calor y se lleva a un evaporador que le quita la humedad. El agua sobrante cae a un depósito o directamente por el desagüe de la cocina. De igual manera, el aire también vuelve al bombo y se reutiliza.

Además, la eficiencia energética de estas secadoras es mejor debido a que necesitan menos vatios para funcionar. Aunque el precio de una secadora con bomba de calor es algo más elevado respecto a las secadoras de condensación.

Los pasos de su mecanismo son los siguientes:

• • Mediante un ventilador el aire circula por el interior de la secadora.

• • Este aire pasa por un calentador.

• • El aire caliente pasa al tambor de la secadora, donde se seca la ropa.

• • Tras ello, el aire está caliente y húmedo, ya que contiene el vapor de agua de la ropa. Ahora, el aire pasa al condensador, donde se enfría. El vapor de agua se condensa y el aire se seca.

• • El aire frío y seco sale del condensador.

• Este aire regresa al calentador, de manera que es reutilizado y así ocurre sucesivamente.

La clave está en la capacidad de estas secadoras de transportar el calor de un sitio a otro para aprovecharlo al máximo, de forma que se emplea la energía justa para secar las prendas.

Algunos de sus beneficios de las secadoras con bomba de calor

• • El uso, la selección y el manejo de los programas es muy sencillo. Igual pasa con el funcionamiento de los modelos de bombas de calor, respecto al llenado y vaciado de la carga. El panel de control no tiene ninguna complejidad.

• • El nivel de ruido que emiten es menor que el de otras secadoras.

• • Los equipos con bomba de calor consumen menos de la mitad en cada programa de lavado. Esta cuestión resulta especialmente interesante en este momento, ya que nos puede ayudar a ahorrar en la factura eléctrica que nos llega a casa cada mes.

• Ofrecen un mayor cuidado para la ropa y te permiten secar tejidos más delicados. De hecho, algunas de nuestras secadoras con bomba de calor incluyen un cesto para la ropa delicada.

Mantenimiento de tu secadora de ropa

Para que la secadora tenga un correcto funcionamiento debes mantenerla en las condiciones óptimas. Tras cada uso es aconsejable que quites las pelusas del filtro. Te decimos a continuación cómo hacerlo:

• • Primero, retira las pelusas que se hayan quedado en la junta de la puerta.

• • Después, extrae las pelusas del filtro y ábrelo. Pasa la mano para quitarlas. Después, una vez limpio, vuelve a colocarlo en su sitio.

• Si está muy sucio u obstruido te recomendamos limpiarlo con agua caliente y secarlo bien.

Además, hay que tener cuidado con los sensores de humedad. Con el tiempo, puede que aparezca una capa de cal. Para retirarlos debes limpiarlos con la cara áspera de una esponja humedecida.

Ahora que ya sabes todos los beneficios de las secadoras de bombas de calor, ¡No te quedan excusas para no elegirla!