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¿Cuándo se te estropea el lavavajillas no piensas que es siempre en el peor momento? Bueno, ya sabemos que el lavavajillas es un aliado indispensable en cualquier hogar, ahorrándonos tiempo y esfuerzo. Sin embargo, requiere cuidados para mantener su rendimiento y prolongar su vida útil.
La vida útil de media de un lavavajillas se encuentra entre 10-15 años, pero, ¿sabías que con un mantenimiento óptimo puedes alargar su vida útil más de 20 años?
¿Qué puedes hacer para alargar la vida útil de tu lavavajillas?
A continuación, vamos a ver algunos consejos que serán de gran utilidad para que tu lavavajillas funcione como nuevo durante muchos años:
Uso adecuado: Cuida tu lavavajillas en cada ciclo
- Carga el lavavajillas de forma adecuada, sin sobrecargar ni bloquear los brazos rociadores. Coloca los utensilios boca abajo y separa los cubiertos.
- Elimina los restos de comida, esto evitará obstrucciones y mejorará el rendimiento.
- Utiliza el programa de lavado adecuado para cada tipo de carga. Los programas cortos son ideales para una vajilla poco sucia, mientras que los programas intensivos son necesarios para ollas y sartenes.
- Usa una cantidad determinada de detergente, así evitarás que se acumulen restos de jabón en el interior del lavavajillas.
Limpieza y mantenimiento: La clave de la Longevidad
- Limpia el filtro al menos una vez por semana. Los restos de comida que se acumulan pueden obstruirlo, afectando al rendimiento y generando malos olores.
- Verifica que los huecos de los brazos no estén obstruidos. ¿Cómo solucionarlo? Puedes limpiarlos con un palillo o un cepillo pequeño si es necesario.
- Limpia las juntas de las puertas con un paño húmedo para eliminar residuos y prevenir fugas.
- Limpia profundamente el interior del lavavajillas una vez al mes. Puedes utilizar productos específicos o un ciclo de lavado con vinagre blanco.
- La acumulación de cal puede dañar los componentes del lavavajillas. Realiza una descalcificación cada 3-6 meses. ¿Qué es una descalcificación? Es el proceso de eliminar la acumulación de cal, especialmente en las tuberías.
- Asegúrate de que los depósitos de sal y abrillantador estén siempre llenos. La sal suaviza el agua y el abrillantador ayuda a que la vajilla se seque sin manchas.
- Verifica periódicamente que las mangueras de entrada y salida de agua no estén dobladas, agrietadas, obstruidas etc.
Beneficios de un lavavajillas bien cuidado
- Mayor eficiencia energética, ya que, un electrodoméstico limpio y en buen estado consume menos agua y energía, reduciendo el importe en la factura además del impacto ambiental.
- Mejor rendimento de lavado garantiza platos más limpios, sin residuos ni malos olores.
- Menos averías y reparaciones, la prevención de problemas mecánicos evita gastos en reparaciones o en la compra de un nuevo lavavajillas.
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